Salieron del hospital felices con el recién nacido, bajaron de la unidad, pagaron al taxista y entonces, cuando el taxi arrancó, de pronto sintieron que «algo les faltaba» ¡habían dejado al bebé dentro del coche!
Según la policía de Alemania, el padre del bebé, al darse cuenta, intentó alcanzar al taxi, mismo que no se dio de que lo seguían ni que traía un pasajero durmiendo en el asiento trasero.
Luego, el taxista, se dirigió a almorzar, dejando el taxi en un estacionamiento subterráneo, y después de regresar, fue a recoger al aeropuerto a un cliente y fue en ese momento que se dio cuenta de que estaba un bebé de polizón.
Ahí fue donde el chofer, llamó a la policía para avisar de lo sucedido y el bebé fue entregado a sus padres, siendo reportado como bien de salud.
Tremendo susto se llevaron estos padres a los que algunos tachan como «los peores padres del momento» mientras otros simplemente dicen que son unos p… papás olvidadizos.