Doña mala y Don Canijo

Recientes

A partir de los 60 años disminuye el volumen del cerebro humano

Para envejecer saludablemente hay que realizar actividades cognitivamente estimulantes como estudiar, leer, practicar algún deporte o juegos de mesa, labores...

Martha Herrera impulsa derechos laborales con la campaña «Hogar Digno, Futuro Seguro»

En México, 2.2 millones de personas se dedican al trabajo del hogar remunerado, de las cuales el 90% son mujeres. A pesar de su importancia, muchas carecen d...

El deporte como herramienta de inclusión social

La Feria Deportiva de los Centros Comunitarios en Nuevo León se ha consolidado como un evento clave para la integración social y el impulso del talento depor...

Investigaciones contra Ana Gabriela Guevara avanzan en la Conade

El titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), Rommel Pacheco, confirmó que existen carpetas de investigación en curso contra su antecesora, Ana Gabriela Guevara, por presuntas irregularidades durante su gestión.

El adiós a Olegario Vázquez Raña, visionario empresario

El empresario y dirigente deportivo Olegario Vázquez Raña falleció este viernes a los 89 años, dejando una huella imborrable en los sectores empresarial, fin...

Compartir

Al servicio de la comunidad.

Cuando niño no era bien vista en casa, bueno nomás por las tardes, solo había una en casa y generalmente estaba muda.

A los niños nos dejaban tener contacto con ella por las tardes, pero solo un ratito, luego venían las mamás, la familia entera y ya por la noche solo los adultos.

Pero un día, esa presencia se convirtió en algo así como nuestra enemiga, en nuestra pesadilla, se comenzó a multiplicar y entonces ya no solo era una, ni dos, había casas en las que habitaban varias, y la gente comenzó a dejar de compartirla y la veían juntos, cada quien lo que quería a la hora que quería.

Se le dio más importancia el verla, el admirarla que el pasar tiempo con los amigos, la familia, con uno mismo y su soledad, esa soledad, ese silencio que solo es para privilegiados.

A veces me pregunto si hay personas que tienen miedo de estar a solas, en silencio, necesitan ese ruido de fondo, esa triste compañera para no sentirse solas o quizá para no ver la realidad.

También te puede interesar:  Argentina congela tarifas de teléfono, internet y TV por COVID-19

La televisión de pronto se convirtió en niñera, en educadora, en el primer contacto de muchos bebés y niños con la realidad, si es que eso es la realidad.

Luego se les conectó una consola con videojuegos y los jóvenes pasaron la mayor parte del tiempo pegados al sofá dejando a un lado aquellos paseos en bicicleta, las tertulias, el tener un trabajo por las tardes o los fines de semana, o el simple, sencillo y gratificante ocio.

No, la televisión no dejaba ciego a nadie como nos decían nuestros padres para que dejáramos de verla, pero quizá deja otras secuelas en el ser humano y más aún en nuestros niños y niñas.

iPhone, iPad, iMadres

Ahora, no solo tenemos en nuestra casa a la TV para alejarnos, ahora cada miembro de la familia cuenta con un dispositivo (o más) que le permite estar más “cerca” de los suyos, de sus “amigos” (sin estar).

Bienvenido a nuestras vidas Señor teléfono inteligente (que suele ser más listo que muchos de sus dueños),  bienvenidas Señoras tablets, ahora cada vez más jóvenes (y adultos) andan por la vida con la cabeza baja, mirando al suelo como si se avergonzaran de algo, como si hicieran una venia o una reverencia a algo divino, sagrado.

También te puede interesar:  Un Zapatero remendón de los que ya no hay

A veces me pregunto si el fondo de todo esto, es que el ser humano tiene miedo a sí mismo, a sus semejantes, y todo esto es mero pretexto para no enfrentarse a lo desconocido…nuestro interior.

Espero no sea demasiado tarde para levantar la cabeza, vernos más a los ojos, decirnos las cosas de frente, tener dignidad.

Deseo que un día, una tarde, todos los niños y jóvenes dejen el sofá, el  aparato inteligente y no hagan nada, se aburran, practiquen el ocio hasta que se encuentren a ellos mismos, y luego, cuando estén verdaderamente cansados, prueben con salir a la calle, buscar a sus amigos, quien quita y en una de esas hasta les gusta y se les hace una costumbre…muy, muy buena por cierto.

 

¡Hasta el próximo  Sábado!

Acá todas mis historias ► http://sp2018f01szjd.wpengine.com/category/don-rambaro/

Sígueme en Twitter @DonRambaro

También estoy  en Facebook ►  www.facebook.com/DonRambaro

Comentarios