Una ardilla estuvo a punto de morir, pero afrotunadamente se encontró con un habitante de Cartagena, Colombia, quien le dio reanimación cardiopulmonar con el dedo.
Después de sufrir una descarga eléctrica con cables de alta tensión, el hombre puso al animalito sobre el asiento de su motocicleta y no dudó en ayudarla.
En poco más de un minuto la ardilla respiró. Aunque se quedó por un momento acostada, mientras la persona la acarició en su lomo para que se tranquilizara.
Al “volver a la vida”, el animalito saltó del vehículo, se quedó estática, pero posteriormente siguió su camino y se echó a correr.
Con información de El Big Data
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