Un estadounidense, tetrapléjico desde hace 10 años, pudo volver a usar el brazo y la mano derecha para beber y comer, gracias a una nueva neuroprótesis.
Gracias a un dispositivo se sortea la lesión de la columna vertebral, utilizando hilos, electrodos y programas informáticos para reconectar el cerebro del paciente con los músculos del brazo paralizado.
Bill Kochevar, de 56 años, tiene dos dispositivos sobre la cabeza y 192 microelectrodos implantados quirúrgicamente en el cerebro, que registran las señales que la materia gris envía cuando quiere mover el brazo o la mano.
Gracias al dispositvio los músculos reciben instrucciones mediante 36 electrodos implantados en el brazo y antebrazo.
«Para alguien que está lesionado desde hace varios años y que no podía moverse, ser capaz de hacerlo, aunque sea muy poco, es impresionante», declaró Kochevar.
Con información de La Jornada