Richard Anthony Jones durante 17 años juraba que era inocente, negaba que hubiera sido él quien cometió el robo que le achacaban…y estaba en lo cierto.
Corría el año 2000 cuando los testigos del caso al verlo de inmediato lo identificaron como el culpable del delito de robo, pero es ahora, 17 años después es puesto en libertad luego de que encontraran a su doble, se parecen tanto que testigos dijeron que no podían diferenciarlos.
Fueron sus mismos compañeros de la cárcel quienes le dijeron a Jones que era idéntico a Ricky, un ladrón (quien curiosamente vivía cerca del a escena del crimen); «Cuando vi la foto de mi doble todo cobró sentido para mí», dijo Richard Anthony Jones
Como no hubo pruebas de huellas o ADN, las pruebas se basaron simplemente en testigos y por eso fue condenado, ahora recibe un «usted disculpe» y fue puesto en libertad.