Si bien las historias de terror de las víctimas con coronavirus están al día, también las hay esperanzadoras, como esta la de una madre argentina y su pequeño.
Adrianna Ocampos, de Mendoza, es la mujer que trabaja como policía en Argentina, pero debido a que dio positivo a COVID-19, tuvo que aislarse de la familia, entre ellos su bebé de solo dos añitos.
«No llores mi amor, ya mamá va a ir a la casa. Te amo», se escucha decir entre lágrimas a Adrianna, la mamá del pequeño David, a quien trata de consolar a través del vidrio de una ventana; la única manera de la que se pueden comunicar para que el bebé no sea contagiado.
Según autoridades de salud, la salud de la mujer va en recuperación, por lo que esperan que pronto sea dada de alta y pueda encontrarse con su bebé.
«Soy positivo en #COVID19 y no por andar rompiendo la cuarentena, si no por hacer mí trabajo, lo que me corresponde por ser Policía!!! Hoy fue uno de los días más difícil de mí vida, ver al amor de mí vida a través de un vidrio, no poder abrazarlo, ni besarlo me partió en dos esa situación de mierda….. Solo le doy gracias a Dios por qué, el dio negativo y pudo irse a casa, se que va a estar bien cuidado a tu lado Patriiciia Montenegro y te agradezco por todo lo que estás haciendo por nosotros!!! TE AMO MI PEQUEÑITO, MAMÁ PRONTO VOLVERÁ A CASA A LLENARTE DE BESOS….. Gracias a todos mis amigos que nos están ayudando y están presente y pendientes de mí salud, yo voy a salir de ésto, POR QUE DIOS ES GRANDE Y MARAVILLOSO!!! Perdón si no puedo etiquetar a todos…», dice el texto que acompaña al video que se volvió viral.