Entró a la fiesta para divertirse, y enfrente de la casa donde se celebraba la reunión, dejó su coche, pero en su interior, sin agua ni comida, estaban sus pequeños bebés.
Una persona le advirtió a Amanda Hawkins de 19 años que los bebés estaban llorando, incluso le dijeron que los metiera a la fiesta, pero hizo caso omiso a los llamados de sus amigos.
Incluso uno de sus amigos, le pidió las llaves del coche para dormir esa noche, pero tampoco hizo caso de la presencia de los pequeños.
A la mañana siguiente, cuando Amanda fue al coche, y las bebés estaban inconscientes, por lo que ella se alertó y fue a la casa para bañarlas, cambiarlas de ropa y posteriormente llevarlas al hospital, en donde dijo que las niñas se habían desmayado porque habían olido unas flores en el parque donde generalmente las llevaba a pasear.
Pero ante las preguntas de la policía, comenzó a contradecirse y finalmente confesó lo que realmente había sucedido, triste y lamentablemente, las pequeñas murieron pocas horas después de haber sido ingresadas en el hospital.
De «encontrarse culpable» a esta «mamá» le será impuesta una multa de solo 70,000 dólares y podría recibir una condena de dos años.
Poco le importó a esta madre dejar llorando a sus bebés de 1 y 2 añitos encerrados en sofocante calor del coche por más de 15 horas, ella prefirió comer, bailar y tomar con sus amigos. ¡Qué poca!