Lo que parecía una simple salida al cine se convirtió en una historia digna de Hollywood, pues resulta que en Newport, Gales, una mujer embarazada de 39 semanas dio a luz en pleno vestíbulo de un cine mientras veía la peli «Sing 2».
Sarah Vincent llevó al cine a su hijo de tres años, Liam, ambos acompañados de sus padres, James y Helen Vincent. Todo iba bien hasta que, veinte minutos después de que comenzara la película, Sarah empezó a sentir que algo no andaba del todo bien. Buscando alivio, decidió dirigirse al baño, pero pronto se dio cuenta de que no era una simple molestia. El bebé estaba en camino, ¡y más rápido de lo que imaginaba!
Pese a sus esfuerzos por llegar al coche familiar, Sarah solo alcanzó a llegar al vestíbulo del cine, donde la situación estalló y no tuvo más opción que recostarse en el suelo. Con una calma de monje, la mujer pidió una silla y asombrosamente dijo: «No, necesito recostarme». Y así fue como, en medio del asombro general, Sarah anunció: «No quiero dar a luz aquí, pero creo que es el momento».
El personal del cine reaccionó como verdaderos héroes. Jacey Howcroft, la directora de turno, Andrew Brown, trabajador del cine, y Amy Screen, una espectadora, se unieron en un equipo de emergencia improvisado siguiendo las indicaciones de los paramédicos al teléfono, y así, en solo diez minutos, el trío ayudó a Sarah a dar a luz a una niña sana, Lowri, que pesó 3.2 kilos.
El director general del cine, Mo Williams, expresó su gratitud hacia su equipo: «Estoy increíblemente agradecido a los líderes del equipo, quienes actuaron rápidamente y ayudaron a que el bebé naciera de manera segura».
Y como cereza en el pastel, Williams anunció que la pequeña Lowri recibirá una membresía de por vida a Cineworld Unlimited. ¡Podrá ver pelis gratis para siempre!
Así que mientras la mayoría de los bebés llegan al mundo en hospitales, Lowri hizo su gran debut en un cine, ganándose un pase dorado a películas gratis de por vida.
¡Vaya suerte de la bebecita! Hasta dan ganas de haber nacido en un cine, ¿no?