Hasta parece una historia de esas sacadas de una película de acción, pero no, pasó en la vida real.
Imagina que un día mañana, una mujer se encuentra súper concentrada en dejar sus vidrios relucientes… resbala ¡desde el décimo piso!
La pobre mujer terminó colgando del marco de su ventana, aferrada como toda una heroína a la ventana superior, mientras sus pies apenas se sostenían en la parte de abajo.
¡Y todo esto fue captado por una persona que se encontraba en un edificio de enfrente!, obvio, porque como no podía faltar, mientras algunos intentaban salvarla, otros decidieron sacar su celular para grabar el dramón en lugar de llamar a los bomberos.
La cosa se puso fea, pero después de un par de minutos que parecieron una eternidad, la pobre mujer empezó a gritar por ayuda, aterrada, y ahí es cuando los vecinos entraron en acción.
Al final, unos valientes entraron al apartamento y, con mucho esfuerzo y coordinación, lograron ponerla a salvo. Todos los presentes quedaron con el corazón a mil, pero lo importante es que la mujer salió completamente ilesa.
Afortunadamente todo quedó en un susto mayúsculo, una anécdota y obvio en los celulares de varios vecinos.
Y no es por intrigar, pero hay gente que sí se pasa en eso de la limpieza.