Luego de haber sido una persona muy activa, y luego estar postrada en silla de ruedas no es nada fácil, es precisamente lo que le sucedió a Silvia, a quien hace 17 años le detectaron esclerosis múltiple.
La vida de esta mujer y toda su familia cambió por completo, al grado de que tuvo que depender para todo de su esposo y su hijo Erik.
«No ha sido nada sencillo»…«Pero es como en todo en la vida, si le pones ganas y actitud, acabas haciéndote a la idea e incorporas esas nuevas situaciones a tu día a día»…dice el hijo de esta mujer que no la ha abandonado por nada del mundo, y que tuvo la idea de correr el maratón pero acompañado de su madre en silla de ruedas, para hacerla que sintiera algo de libertad.
Erik y su madre corrieron juntos los 42 kilómetros de la carrera de Barcelona, fue su primer maratón juntos, cosa que no fue nada fácil y así lo relata el joven:
«Por un lado, su estado físico, la podía poner en peligro, y, por otro lado, el mío, ya que sería 4 veces más la distancia máxima que había corrido con ella y también estaba el riesgo físico al proponerme acabar en un tiempo de entre 3h 15 min y 3h 30 min»...dijo a medios.
Solo hay que ver el rostro de alegría de la mujer, para ver que todo el esfuerzo de su hijo valió la pena.