Dos adolescentes de Florida, Perry Cohen y Austin Stephanos, ambos de 14 años de edad, salieron de pesca desde el puerto de Jupiter Inlet, Florida, el 24 de julio y a las pocas horas, una tormenta con fuertes vientos alcanzó su lancha.
Desde entonces, la única noticia que se tenía de los adolescentes, era un mensaje de Snapchat en el que decían “estamos jodidos”; y después de eso, silencio; hasta marzo, cuando su bote apareció a 100 millas de la costa de las Bermudas.
Lo extraño es que, de acuerdo con nueva evidencia difundida por la Florida Fish and Wildlife Conservation Commission, el bote podría haber estado manipulado, como lo indica el hecho de que el interruptor de la batería estaba apagado cuando encontraron la embarcación. El abogado de la familia Cohen, Guy Rubin, declaró que es imposible que el interruptor de la batería se apagara de manera accidental, “sabemos con certeza es que el barco se desactivó intencionalmente debido a que el interruptor de la batería, que fue muy difícil de encontrar, estaba en apagado… eso no puede ser modificado por el paso del tiempo, la corriente y otros eventos. La llave en el switch estaba en la posición de apagado. Si la tormenta llegó y volcó la lancha, el interruptor de la batería y la llave no estarían en esa posición”.
Un marino informó que los jóvenes podrían haber apagado la lancha para conservar la batería. Si el bote tuviera una falla mecánica, la alarma del motor sonaría constantemente, por lo que se habrían visto forzados a apagarlo.
Además del mensaje de Snapchat, Cohen y Stephanos, contactaron a sus familias antes desaparecer, los últimos mensajes que envío Perry a su madre fueron, “Mamá, soy Perry. Mi iPad está muerta…Te mensajeo en un ratito. Te amo” y “…voy a dormir en”, en respuesta a la solicitud de la madre de dormir en casa esa noche.
Los investigadores encontraron otro mensaje que plantea que los jóvenes planeaban ir de pesca lejos de la costa para ver a los delfines de cerca.
Así, la desaparición de los adolescentes sigue siendo un misterio. Habrá que esperar que las investigaciones revelen lo que sucedió realmente con Curry y Stephanos.
Con información de López-Dóriga Digital