Un grupo de manifestantes destrozó e incendió el sábado una parte de las oficinas del Congreso de Guatemala durante una protesta contra recortes al gasto en el presupuesto para 2021 promovidos por el gobierno del presidente Alejandro Giammattei.
Los hechos ocurrieron durante el reclamo de cientos de personas que salieron a las calles luego de que en la madrugada del miércoles, mientras los guatemaltecos aún afrontan los estragos de la tormenta Iota, los diputados aprobaron el presupuesto, que incluyó recortes en salud, educación, justicia y derechos humanos y aumentos en deuda pública.
La medida indignó a diversos sectores, desde empresariales hasta religiosos y estudiantiles, en un año marcado por la crisis económica provocada por la pandemia de coronavirus.
Con pancartas con leyendas como «Ya basta al sistema de corrupción» y «El poder está en nosotros, los guatemaltecos exigían en Ciudad de Guatemala a Giammattei dar marcha atrás a las reducciones.
«Ya rebasaron el límite de la corrupción. Yo le pido al presidente que lo vuelva a estudiar, a dictaminar; tiempo todavía tiene», dijo Alex Aguilar, un estudiante universitario de 28 años, quien participaba en la protesta en la capital.
En medio de las presiones contra el mandatario, el vicepresidente Guillermo Castillo también expresó su rechazo e invitó a Giammattei a renunciar. «Renunciemos los dos», dijo el viernes por la noche en un mensaje televisado, como una forma de acallar la molestia de la población.
Giammattei, por su parte, había dicho en cadena nacional en la víspera que se sentaría «con todos los que sea necesario» para explicar el porqué de los recortes en el gasto para el próximo año.
Además de la epidemia, que ha dejado 4,074 muertos y contagiado a 118,417 personas, Guatemala tiene que enfrentar ahora los efectos de una catastrófica tormenta que azotó a la región recientemente, dejando a más de 356,000 personas afectadas en el país centroamericano.
Información de Reuters