Henry y Jeanette De Lange, eran una hermosa pareja de viejecitos que se amaban tanto que murieron con solo 20 minutos de diferencia después de tener un poco más de 63 años, esto en dakota del Sur en los Estados Unidos.
«Fue sin duda un acto hermoso, un acto proveniente por la misericordia de Dios»…»No se puede pedir algo más hermoso»…dijo uno de los hijos para los medios.
Ella vivía en el asilo donde ambos murieron desde el 2011 víctima del Alzheimer, su esposo pedía a sus hijos que lo llevaran a verla y podía hacerlo un par de veces por semana, pero luego vino una mala noticia, él estaba enfermo de la próstata, así que pidió que fuera internado en el mismo lugar que su amada esposa.
Un día, Jeanette, la esposa de 87 años murió a las 5:10, por lo que tomaron la decisión de avisarle al padre que al parecer se resistía a irse solo por el gran amor que tenía por su pareja de tantos años.
«Leímos el Salmo 103…Ella murió en paz, muy tranquila, increíblemente en paz»…dijo una de las hijas del matrimonio
Luego tuvieron que tomar la decisión de avisarle al esposo.
«Papá, mamá está ya en el cielo, te amamos mucho, pero no tienes que luchar más…si lo deseas, también puedes irte…si lo quieres», dijo otro de sus hijos, finalmente el padre enfermo por primera vez en mucho tiempo, abrió los ojos, volteó a ver a su esposa y murió.
Curiosamente, el reloj de la habitación se detuvo a las 5:30 la hora que el último de los dos falleció.