¿Qué diablos es eso? Conejos «zombie» con cuernos invaden Colorado
¡Paren todo! Porque lo que está pasando en Fort Collins, Colorado, parece salido de una película de terror de bajo presupuesto, pero no, no es un capítulo de The Walking Dead: son conejos con cuernos… ¡y sí, la cosa es real!
Un grupo de conejos de rabo blanco ha sido avistado con crecimientos grotescos en sus caras, que algunos han bautizado como “conejos de Frankenstein”, “conejos demonio” o “conejos zombi”. Pero tranquilos, que no es para ponerse a temblar. Los científicos explican que todo se debe al virus del papiloma de Shope, algo relativamente común entre conejos y que provoca esas verrugas que, cuando crecen, parecen cuernos.
Este fenómeno no es nuevo: hace casi un siglo inspiró el mito del jackalope en Norteamérica y contribuyó a investigaciones que ayudaron a entender la relación entre virus y cáncer, como el virus del papiloma humano, que puede afectar a las personas.
Los residentes de Fort Collins empezaron a publicar fotos de estos curiosos peludos, y claro, se volvió viral. La agencia de Parques y Vida Silvestre de Colorado recibió un montón de llamadas, y la portavoz, Kara Van Hoose, explicó que esto no es raro, especialmente en verano, cuando las pulgas y garrapatas —que transmiten el virus de conejo a conejo— están más activas.
Y aquí va la parte importante: el virus solo se transmite entre conejos, principalmente por la picadura de esos insectos durante los meses cálidos. El SPV, pariente del virus del papiloma humano, no representa ningún riesgo para humanos, mascotas ni otros animales silvestres. Por lo general, no perjudica al conejo, salvo que los crecimientos afecten ojos o boca, como aclararon las autoridades.
Además, se recomienda a los vecinos no acercarse ni tocar a los conejos infectados, para evitar estresar a los animales y mantener la distancia segura.
Así que ya saben: la naturaleza siempre tiene su lado bizarro y sorprendente, pero no todo lo raro es peligroso.
Estos conejos son prueba viviente de que la realidad a veces supera a la ficción… ¡y de que hasta los peluditos pueden tener su momento de terror viral!