Si bien tomarse una selfie es algo común entre los jugadores olímpicos, esta vez toma otra dimensión pues quienes se tomaron la postal fueron dos jovencitas gimnastas cuyos países se encuentran (técnicamente) en guerra, no solo políticamente, sino también en el ámbito deportivo.
Lee Eun-ju, de Corea del Sur, y Hong Un-jong, de Corea del Norte fueron las protagonistas de este momento que está dando muchos de que hablar, solo esperamos que ninguna de ellas sea sancionada por su país ni que «le llamen la atención» cuando regresen a sus hogares.
Vaya, hasta que vemos una selfie que vale realmente la pena, pues es sin duda un momento histórico y habla del verdadero espíritu olímpico.
Fotos:REUTERS-EFE