Sumada a la escalada de precios en las gasolinas y las tortillas, el precio del gas licuado de petróleo en cilindro, combustible que utilizan siete de cada 10 hogares mexicanos, subió 7.1 por ciento. Pasó de 18.66 pesos por kilo a mediados de diciembre (precio ponderado en la Ciudad de México) a 20 pesos a partir de enero.
Tan sólo en 2017 en la Ciudad de México el precio del gas LP en cilindro subió casi 30 por ciento, al pasar de 14.64 pesos por kilogramo en enero a 18.66 pesos en diciembre, según cifras de la Comisión Reguladora de Energía.
En lo que va del actual sexenio priísta el precio del gas LP se ha incrementado 45.3 por ciento, pues según cifras de Petróleos Mexicanos, el promedio ponderado nacional del litro de gas LP en cilindro subió de 12.94 pesos durante 2013 a 18.81 pesos a mediados de diciembre de 2017, de acuerdo con cifras de la CRE.
En el caso del gas estacionario el precio ponderado nacional registrado por la CRE pasó de 8.10 pesos por litro en enero de 2017 a 10.12 en diciembre, incremento de 2.02 pesos por litro o alza de 25 por ciento.
La CRE explicó que a partir de la liberalización de los precios, el primero de enero de 2017, el costo que ahora pagan los consumidores finales está compuesto por los mayoristas, los costos de logística y el margen de los distribuidores.
Con información de La Jornada