Tras los trabajos de cerca de 500 policías y buzos, además de helicópteros, fue encontrado el cadáver del niño de dos años que fue atrapado por un cocodrilo de más de 1.2 metros, mientras jugaba en la laguna conocida como “Seven Seas”, en el parque de diversiones Disney World.
Para lograrlo, personal de fauna tuvieron que sacrificar a cinco caimanes según explicó Nick Wiley, director ejecutivo de la Comisión de Conservación de la Vida Salvaje y Acuática de Florida.
El cuerpo casi intacto del pequeño Lane Graves fue encontrado esta tarde, en un punto no lejano de donde fue arrastrado.
Ahora ya recuperado el cadáver, las autoridades dicen que compararan las mandíbulas de los animales previamente atrapados o buscaran a otros cocodrilos para asegurarse que tienen al animal causante de esta tragedia.
Con información de Excélsior y CNN