El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, y el canciller mexicano, Juan Ramón de la Fuente, sostuvieron una conversación clave para abordar temas de seguridad fronteriza, combate al crimen organizado y control de la migración irregular.
Compromiso bilateral para frenar el crimen organizado
Uno de los principales temas tratados fue la lucha contra las organizaciones criminales transnacionales que operan a ambos lados de la frontera. Durante la conversación, Rubio y De la Fuente reafirmaron su compromiso de cooperación para desmantelar estas redes delictivas, cuyo impacto afecta tanto a Estados Unidos como a México.
Además, se discutieron medidas para frenar el tráfico de fentanilo y sus precursores químicos provenientes de China, un problema de salud pública que ha cobrado miles de vidas en Estados Unidos en los últimos años.
México refuerza su presencia en la frontera
El secretario Rubio agradeció al gobierno mexicano el despliegue de 10,000 elementos en la frontera con Estados Unidos, una medida que busca contener el flujo de migrantes irregulares y fortalecer la seguridad en la región.
Ambos funcionarios coincidieron en la necesidad de seguir trabajando de manera coordinada para garantizar un manejo eficiente de la migración y evitar que grupos criminales se aprovechen de la crisis migratoria.
Alianza estratégica entre vecinos y socios
Tanto Rubio como De la Fuente enfatizaron que la relación entre ambos países es fundamental para la estabilidad de la región. Como vecinos y socios, la cooperación en materia de seguridad y migración seguirá siendo una prioridad en la agenda bilateral.
A medida que las tensiones en la frontera sur de Estados Unidos continúan, este diálogo representa un paso clave en la búsqueda de soluciones conjuntas para uno de los desafíos más urgentes de la relación entre ambos países.