«Siempre la recordaremos como una chica encantadora (…) Es horrible que muriera de la forma en que murió», dijo un conocido de Keira Ladlow, joven de 25 años, quien muriera por el ataque a mordiscos de un perro al que había rescatado.
Los primeros indicios indican que el ataque se dio mientras ella dormía.
El día del ataque, la joven estaba sola en su casa en Kitts Green, Birmingham, en Gran Bretaña. Vecinos afirman que se escuchaban los gritos de la joven pidiendo auxilio a lo lejos, pero no pudieron hacer nada, por lo que llamaron a emergencias.
Cuando los paramédicos llegaron, después de las 14:00 horas, era demasiado tarde y declararon muerta a la joven.
Según una prima de la chica, ella había tenido anteriormente un perro al que había querido mucho, pero desafortunadamente, el can murió de cáncer. «Su perro anterior era un pitbull que murió de cáncer, por lo que rescató a este perro después de encontrarlo en un jardín donde había estado intermitentemente durante cuatro años», comentó la familiar.