El Pentágono de Estados Unidos alertó que un cohete perteneciente a China se dirige a la Tierra, pero la preocupación es que no viene de retorno «normal», pues aseguran que viene totalmente fuera de control, y según la sede del Departamento de Defensa de los Estados Unidos, si podría causar daños.
El mencionado cohete es un «Long March 5B», con un peso aproximado de 22 toneladas 22,000 kilos), el cual ingresaría en la atmósfera terrestre alrededor del 8 al 10 de mayo, el problema es que no pueden calcular exactamente por donde entrará, y solo lo podrán hacer momentos después de su reingreso.
«A pesar que nos encontramos rastreando la trayectoria del cohete, las coordenadas más certeras se sabrán hasta que haya reingresado a la atmósfera terrestre», dijeron las autoridades de aquel país.
«Por si no tuviéramos la pandemia, ahora nos estamos preocupando por un pedazo de metal de 22,000 kilos, que viaja 30 mil kilómetros por hora ¡y los expertos no saben por dónde puede entrar a la tierra!», comentaron algunas personas en redes.
Pero, ¿esta preocupación es real?
Según el astrofísico Jonathan McDowell, de la Universidad de Harvard, dijo que el riesgo de daños fuertes o de que le pegue a alguien es muy, muy pequeño, “No creo que la gente deba tomar precauciones. El riesgo de que haya algún daño o de que golpee a alguien es bastante pequeño»…»No es despreciable, podría suceder, pero el riesgo de que te golpee es increíblemente pequeño»…»No perdería ni un segundo de sueño por esto como una amenaza personal», explicó.
La semana pasada vimos cómo China se preparaba para comenzar a montar sus propia estación espacial. Después del lanzamiento con éxito de la primera parte de la estación, el cohete que la llevó a órbita está a punto de volver a la Tierra. Pero volverá sin control alguno, convirtiéndose en uno de los objetos más grandes en reentrar de forma descontrolada.