El suicidio ¿deseo de algo o deseo de nada?

Recientes

Localizan narcotúnel de 600 metros entre Tijuana y San Diego; era usado para tráfico de drogas

Autoridades federales localizaron un túnel clandestino de aproximadamente 600 metros de longitud que conectaba a México con Estados Unidos. El paso subterrán...

Reducción de la jornada laboral en México: arrancan foros para diseñar su implementación

La reforma para reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales ha entrado en una nueva fase. Desde este 19 de junio y hasta el 7 de julio, la Secretar...

Una semana de guerra entre Irán e Israel deja muertos, miedo y una región en incertidumbre.

A siete días del conflicto armado entre Irán e Israel, las tensiones no disminuyen: hay más de 200 muertos, ciudades evacuadas, internet bloqueado y amenazas...

Debemos transitar hacia un modelo energético que atienda las prioridades de México: Luca Ferrari

Es posible lograr un sistema más pequeño y sustentable, y al mismo tiempo alcanzar metas de justicia social y ambientales, acotó. En nuestro país, 28 millone...

Argentinos se hacen pasar por la CFE para estafar ¡pero una sola palabra los delató!

No es broma, compa. Un grupo de estafadores desde Argentina intentó colarse en las bandejas de entrada de miles de mexicanos, haciéndose pasar por la CFE. El...

Compartir

Siempre me enorgullece cuando un ex alumno del Doctorado en Psicoterapia (APM) está por presentar su disertación para obtener el título. En esta ocasión se trata del psicoterapeuta Juan Alberto Ortiz Moore [albertortizmoore@yahoo.com] quien ha trabajado arduamente el tema del suicidio. Es por ello que le pedí nos escribiera algunas líneas que nos ilustraran un poco en torno a este tema tan, pero tan doloroso. Los dejo con sus palabras.

El suicidio es un acortamiento voluntario de la vida en que, una vez consumado, no existe un sujeto con quien un especialista en salud mental pueda trabajar para buscar una mejoría. De esta forma, el trabajo con conductas suicidas representa un tratamiento preventivo. En México, el suicidio es un problema muy grave que ha ido incrementando en los últimos años. Lamentablemente, la Organización Mundial de la Salud (OMS) sitúa a México en la lista de índice de suicidios en el lugar 75, con 4 suicidios consumados por cada 100,000 habitantes durante el año 2008. El país con más casos es Lituania con 34.1 por la misma cantidad de habitantes.

Al investigar sobre el suicidio, uno se encuentra con una gran escasez de información o documentos poco confiables. Lo anterior se debe, en gran parte, al sufrimiento y la pena por que pasan los familiares de la víctima. En nuestro país, al tratarse de una muerte autoinfligida forzosamente para fines legales se tendría que realizar una necropsia, por lo cual se tiende a encubrir la causa de muerte con el fin de evitar aún más dolor en los familiares.

También te puede interesar:  PGJ investiga suicidio en Ciudad Universitaria

La adolescencia es una etapa especialmente difícil en la vida de un ser humano: es cuando el niño comienza a separarse de su familia y busca grupos de pares con quienes compartir sus sentimientos y los cambios (físicos y emocionales) que está viviendo; es una individuación para así pasar a la adultez. Es un proceso sensible desde diversos puntos de vista, mientras que no todo individuo cuenta con las herramientas necesarias para llevarlo a cabo favorablemente, ó encontrar el apoyo que requiere; tornándose así más susceptible a conductas suicidas. Por ello, lamentablemente, el IMSS y la OMS han determinado que el suicidio es la segunda causa de jóvenes entre 15 y 24 años.

El suicidio deja una secuela de complicaciones y de dolores. Es un tema difícil, del cual muchas veces se busca evitar hablar, se intenta enseguida buscar una respuesta cómoda y rápida, perdiendo de vista la demanda que nos hace el individuo. El dolor, el sufrimiento y, frecuentemente, el odio que siente un suicida provoca una reacción extremadamente incómoda en uno. Esto, en parte, se debe a un sentimiento de vacío que experimenta el suicida, una tristeza extrema en que no vislumbra ninguna salida de sus males, una situación de desesperanza.

La conducta suicida no se encuentra inscrita como una patología, sino como un síntoma de ésta. Una de las patologías que se presenta en los pacientes suicidas es la melancolía, caracterizada por un duelo no resuelto en el cual el doliente se reprocha y se castiga pensando que es el causante de la destrucción del objeto o de la persona que perdió. También encontramos individuos que tienen alguna fobia e intentan escapar de los estados extremadamente elevados de ansiedad que sufren, y ven la muerte como la única solución. Finalmente, se ha encontrado que frecuentemente se cometen suicidios cuando el afectado se encuentra bajo la influencia de alguna sustancia.

También te puede interesar:  Uno tiende a “Emparejarse” para bien o para mal

En varias ocasiones, los actos suicidas representan la búsqueda de la atención de otra u otras personas; sin embargo, no se trata de una búsqueda de algo, sino una demanda de amor. Y es precisamente lo anterior que suele provocar el sentimiento de culpa de no haber podido prevenir la muerte del sujeto; lo que se hizo en realidad fue tratar de suplir sus supuestas necesidades, pero no se llegó a la raíz, que es el amor genuino.

Lo que se busca hacer es darle una voz al que no la tiene y sufre en soledad. Y si, lamentablemente, ya ocurrió un suicidio, entonces se busca darle voz a aquéllos que sufren la pérdida, y, ante todo, evitar los estigmas sociales que se ven involucrados provocando un gran daño. También es importante la disponibilidad de sitios de Internet y lugares donde se puede buscar información y ayuda, y, esencialmente, no tratar de soportar un sufrimiento tan agudo en soledad.

Comentarios