Por el momento se contabilizan al menos tres muertos y más de 500 mil evacuados y afectados por estragos causados por el tifón Nock-Ten que hoy atraviesa Filipinas con fuertes vientos y copiosas lluvias.
Nock-Ten, llegó al país con vientos sostenidos de 185 kilómetros por hora y ráfagas de hasta 255 kilómetros por hora, ha perdido fuerza en su avance y se encuentra en mar de China Meridional con vientos sostenidos de 120 kilómetros por hora, tras pasar cerca de Manila.
En Polangui, ciudad de Catanduanes, los daños han sido muchos, siete de cada diez casas están destruidas, de acuerdo con el vicegobernador, Harold Imperial. Las provincias de Albay, Batangas, Camarines del Sur, Quezon y Sorsogon padecen cortes del suministro eléctrico y más de 300 vuelos han sido cancelados.
Autoridades han advertido a evacuados y desplazados que todavía es pronto para regresar a sus hogares, que esperen un poco a que se aclare la situación y remitan las aguas.
Con información de Excélsior