En Pakistán, una mujer quemó viva a su hija de 17 años, por casarse sin permiso. Se trata del segundo “crimen de honor”, como su cultura le llama, en las últimas dos semanas de acuerdo con la policía local.
Hassan Khan, marido de Zeenat Bibi (la fallecida), declaró a las autoridades que entre varios familiares retuvieron a la víctima mientras su madre le rociaba queroseno. Después, ella misma le prendió fuego.
Agregó que Zeenat no quería regresar con su familia, pero uno de sus tíos le garantizó su seguridad.
Tras dos días de atención, la mujer falleció.
Hace una semana, una profesora también fue quemada y torturada tras rechazar una propuesta matrimonial.
Estos son crímenes habituales al sur de Asia y que algunos hombres usan en forma de revancha contra mujeres que supuestamente retaron o dañaron su moral y la de su familia. La Comisión de Derechos Humanos de Pakistán, informó que 923 mujeres fueron víctimas de estos actos en 2015, aunque los números pueden ser mayores debido a los actos no denunciados.
Ante la situación, el primer ministro paquistaní Nawaz Sharif prometió tomar medidas contra este tipo de delitos.
Con información de El Universal