Autoridades mexicanas reportaron el viernes 504 nuevos fallecidos relacionados al coronavirus, elevando la cifra total de muertos a 16,448, el mismo día en que la Organización Mundial de la Salud (OMS) calificó la situación en el país como «claramente difícil, desafiante».
El brote surgido en China a fines el año pasado y que ocasionará una aguda recesión económica de escala global, dejaba 139,196 infectados conocidos en la nación norteamericana, 5,222 más que en la víspera y un nuevo récord de contagios diarios.
En medio de críticas de expertos y hasta de la OMS, que ha dicho que la epidemia continúa avanzando hacia su acmé en el país, México levantó la semana pasada una emergencia sanitaria de dos meses que permite la reapertura de algunos sectores económicos considerados esenciales.
El subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, admitió en la semana que fue rebasada la estimación oficial de contagios para el Valle de México, conformado por la capital y el contiguo Estado de México. La zona, hogar de más de 21 millones de personas, acumula más del 40% de casos de COVID-19.
A principios de mayo, en una entrevista con Reuters, el funcionario aseguró que «es muy probable» que en México se esté subestimando la cantidad real de muertos como consecuencia del coronavirus, un brote que ha dejado poco más de 7.6 millones de infectados en todo el mundo.