El menor que mató a su maestra y luego se suicidó en su escuela, en Torreón, vivía en un entorno delictivo.
La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) congeló las cuentas de los abuelos y el padre del niño que disparó en una escuela de Torreón, Coahuila, por lavado de dinero y defraudación fiscal.
El abuelo paterno, de 58 años, además, recibió prisión preventiva al ser el dueño de las armas usadas por el menor, a quien aleccionaba para que aprendiera a disparar, de acuerdo con el gobernador de Coahuila, Miguel Riquelme.
«Podemos ver que no es ningún seminarista, el abuelo tiene 121 millones de pesos de flujo en efectivo hacia empresas, tiene en recepción de flujos de efectivo por 24 millones de pesos en sus propias empresas, la adquisición de seis vehículos de lujo en dos años, tres BMW, tres Jeep Cherokee, además de que la abuela (…), tiene la adquisición de tres camionetas de lujo, además blindadas, transferencias de dinero hacia Estados Unidos y un problema de defraudación fiscal», expuso Nieto.
«Ni la abuela, el abuelo, ni el hijo presentan declaraciones fiscales, por tanto es un tema de lavado de dinero y de fraude fiscal. Presentaremos la denuncia correspondiente y haremos el bloqueo de cuentas en razón de que encontramos que no hay fundamento para tener esos flujos de capital, de una persona que lo que tiene formalmente registrado es una casa, un lugar de rentas para fiestas», dijo.
«A su esposa también se le hallaron operaciones sospechosas y ambos están implicados en la compra reciente de autos de lujo o blindados. Autoridades reportaron que el padre del menor estuvo preso en EU por narco, pero ya fue liberado. Sobre su madre hay dos versiones: fue degollada o falleció por una sobredosis durante una cirugía plástica», informó Excélsior.