Emmanuel Macron, del nuevo partido En Marcha, obtuvo mayor cantidad de votos en la primera vuelta de las elecciones francesas celebradas ayer. En segundo lugar quedó la candidata del partido de ultraderecha, Frente Nacional, Marine Le Pen.
El próximo presidente será o un exbanquero liberal con escasa experiencia o la heredera de la ultraderecha, partidaria de salir de la Unión Europea. Este panorama significa una ruptura en la política francesa, ya que quedaron fueran de la contienda los tradicionales partidos socialistas y gaullista por primera vez desde la fundación de la V República en 1958.
Una vez conocidos los resultados, Macron recibi ó una catarata de apoyos en vistas a la segunda vuelta, procedentes tanto de la izquierda como de los conservadores. Esta movilización en favor del candidato de En Marcha! hace presagiar la formación de un frente republicano: una coalición de izquierdas, centro y derecha contra la extrema derecha, para evitar la victoria del Frente Nacional.
Con información de El País