Una asistente de la galería de arte ’14th Factory’ en Los Ángeles, California, arruinó tres esculturas valuadas en 200 mil dólares por tomarse un ‘selfie’ junto a una de ellas.
Al arrodillarse frente a una columna que sostenía una corona para tomarse una foto, la joven perdió el equilibrio empujando el pedestal que provocando un efecto dominó tirando al suelo un total de 10 coronas.
Con información de Excélsior