Agustín Hernández, un operador con 21 años de servicio, dijo que dicho fenómeno se concentra “después de Garibaldi hasta la Central del Norte”.
Explicaron que operadores y usuarios padecen a un grupo de cuatro jóvenes que se suben para exigirles cuotas “voluntarias” de 20 pesos a los hombres y diez pesos mujeres. En un tono agresivo y se justifican diciendo que acaban de salir de la cárcel o que uno de sus familiares falleció y necesitan el dinero.
El presidente del Consejo Ciudadano capitalino, Luis Wertman, dijo que existen herramientas para combatir dicho fenómeno, porque se encuentra tipificado como delito.
Con información de Excélsior