¿A qué edad consideras que los hijos se tienen que ir de la casa de sus padres?
Las familias en México se caracterizan por un profundo sentido de la unión que ha hecho que la sociedad mexicana se fundamente en las llamadas “familias nucleares”, cuya característica principal es que están formadas por padres e hijos.
Tal vez por esto resulta difícil para algunos padres el momento en que sus hijos les anuncian que ya es tiempo de irse de la casa para buscar su propia vida, ya sea con pareja o por el simple anhelo de independencia.
Y entonces surge la pregunta: ¿Cuándo es idóneo dejar la casa paterna? O en el caso de los que somos padres: ¿Cuándo debemos dejar a nuestros hijos independizarse?
Algunas personas dicen que mientras los hijos están en la adolescencia y juventud es correcto que sigan viviendo con sus papás. De lo que se origina otra pregunta: ¿Hasta cuándo se considera que una persona es joven?
Por lo menos en México una institución gubernamental como el Instituto Nacional de la Juventud estipula que los mexicanos son jóvenes hasta antes de cumplir los 30 años. Así que ya tenemos una respuesta: Los hijos pueden y deben irse de la casa de los padres a más tardar a los 30 años.
Para muchos de los que me escuchan, esta idea es algo completamente lógico y hasta resulta un poco tarde porque muchos decidimos partir de la casa familiar para buscar nuestra vida personal y profesional antes de los 30 años.
A partir de los 30 años las expectativas y necesidades ya cambiaron. Se hace necesario un espacio propio, una autonomía para salir y llegar de casa a la hora que nos plazca, tener un empleo para mantenernos y satisfacer ciertos gustos y comodidades.
Para algunos treintañeros se comienza a pensar en la estabilidad amorosa con una pareja fija, formar una familia. O por el contrario, centrar la vida en las expectativas profesionales, viajar, tener varias parejas, etc. En resumen, los treintañeros buscan y necesitan independizarse.
¿Pero qué creen? Hace un par de meses, el 22 de mayo específicamente, una noticia empezó a circular en los medios internacionales cuando un juez del estado de Nueva York ordenó a un hombre de 30 años que abandonara la casa de sus padres.
El protagonista de este caso es Michael Rotondo, quien fue demandado por sus padres, pues según consta en los documentos de la corte, no pagaba alquiler ni ayudaba con las tareas domésticas en la casa familiar.
Pero antes de llegar a la demanda, Mark y Christina -padres de Michael- le escribieron 5 cartas pidiéndole que se fuera. En la primera, fechada el 2 de febrero, ellos le dicen: “Hemos decidido que debes abandonar esta casa de inmediato”.
Michael ignora la carta y sus padres redactan un segundo aviso de desalojo con la ayuda de un abogado. Firmado el 13 de febrero, en el aviso se lee: “Quedas desalojado. Se iniciará un procedimiento legal inmediatamente si no te vas antes del 15 de marzo de 2018”.
Este aviso con la firma de la señora Rotondo también es ignorado por Michael. Pero la pareja no se da por vencida y en una tercera carta le dan a su hijo mil 100 dólares para mudarse y le dejan claro su disgusto, escribiendo:
“Hay trabajos disponibles incluso para aquellos con un historial de empleo pobre como el tuyo. Consigue uno. ¡Tienes que trabajar!”.
Pero tampoco hay respuesta y para el 30 de marzo los esposos Rotondo ya confirmaron que su hijo no tiene la más mínima intención de irse de la casa. Por eso en abril acuden a la corte municipal local.
La respuesta oficial no es tan esperanzadora, pues les dicen que como Michael es un familiar, necesitan que un juez de una Corte Suprema le ordene oficialmente que se vaya de la casa.
Los esposos Rotondo presentan su caso ante la Corte Suprema del condado de Onondaga, cerca de Syracuse, Nueva York, el 7 de mayo. En la audiencia, Michael argumenta que no le habían notificado que se fuera con suficiente anticipación y que necesita por lo menos un plazo de 6 meses.
El juez del caso -Donald Greenwood- califica este argumento como “indignante”. Pero Michael -que se representa a sí mismo- le responde que lo que es indignante es que le den una notificación de desalojo.
Michael también dice que 6 meses es un tiempo razonable para alguien que siempre ha dependido de otras personas, pero acepta al mismo tiempo que se gastó los mil 100 dólares y que no ayuda en las tareas domésticas.
Finalmente, el juez Greenwood ordena al abogado de los esposos Rotondo que redacte una nueva orden de desalojo con el 1º de junio como fecha límite.
Al salir de la corte, Michael asegura que apelará la decisión del magistrado y menciona que sí tiene un trabajo, pero cuando los reporteros le preguntan cuál es, se indigna y sólo responde: “mis negocios son mis negocios”.
El 1º de junio, 2 horas antes de cumplirse el plazo, Michael Rotondo abandonó la casa familiar con sus pertenencias en un par de bolsas de basura. Sin embargo, antes de irse llamó a las autoridades porque su padre no lo dejaba entrar al garage para recoger unos Legos de su hijo de 8 años -cuya custodia está intentando conseguir-.
Antes de que llegara la policía aparecieron los juguetes y Michael tuvo que retirarse de la casa.
***
Después de escuchar este periodismo de vida, te pregunto: ¿Qué cambió en tu vida al cumplir los 30 años? O en caso de aún no cumplirlos, ¿qué esperas conseguir a esa edad?
Escríbeme a las redes sociales de QTF y comparte tus opiniones.