El empresario mexicano Carlos Slim y el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump compartieron una cena juntos este fin de semana en una propiedad del magnate en Palm Beach.
El vocero de Trump calificó el encuentro como un gesto “de paz” entre ambos, luego de que el republicano despreciara al mexicano durante el cierre de su campaña, agregó que fue descrita por el republicano como “una adorable cena con un hombre maravilloso”.
La reunión fue resultado de una serie de negociaciones extraoficiales, incluida una visita secreta de Corey Lewandowski, enviado de Trump a la Ciudad de México, e indica un “posible descongelamiento” entre el presidente electo y la élite política y empresarial mexicana.
Esta reunión dio esperanza a empresarios de México sobre la posibilidad de que Trump reconsidere su postura frente al Tratado de Libre Comercio de América del Norte y suavice sus políticas de migración. Sin embargo, este sábado, horas antes de su reunión con Slim, Trump expresó ante una multitud en Alabama: “No se preocupen, vamos a construir ese muro”.
Para el periódico Washington Post, el encuentro con el empresario mexicano estaba diseñado para abrir una línea de comunicación “amigable” y no para discutir detalles de las políticas.
Con información de Aristegui Noticias