El Partido Revolucionario Institucional celebró ayer 88 años de edad y Enrique Peña Nieto reconoció un panorama complicado en materia electoral, en el que habrá de imponerse:
«Hoy nuevamente hay riesgos de retroceso. Al igual que hace seis años, están resurgiendo las amenazas que representan la parálisis de la derecha o el salto al vacío de la izquierda demagógica. No olvidemos el estancamiento del que veníamos, ni el riesgo real de perder lo que hemos logrado construir como país en las últimas décadas», sostuvo.
Entre los priístas asistentes al auditorio Plutarco Elías Calles, imperó el ánimo de ganar los próximos procesos electorales en Coahuila, estado de México, Nayarit y Veracruz.
Para Peña Nieto definió el quehacer partidista del PRI:
«Llegamos a romper inercias para transformar y no sólo administrar. No somos el partido que patea el bote o nada de muertito; tampoco somos el partido que engaña con ilusiones y promueve la división. No, señores.» y agregó con mira al 2018, “hoy, México nos convoca nuevamente. Una vez más tenemos que salir a defender el avance del país y el bienestar de su gente. Es un reto que debemos asumir con toda responsabilidad y con profunda seriedad. Quiero decirles que lo que está en juego es mucho más que una elección.»
Con información de La Jornada