Una jugadora perdió su hiyab durante el Campeonato Femenino de la Federación de Futbol de Asia Occidental y sus rivales fueron quienes corrieron a socorrerla.
Todo sucedió en la final de la Liga de Jordania, donde se enfrentaban el Shabab Al Ordan (de color rojo) y el Amman Club, cuando una de las chicas le quitó el balón y en ese momento se le zafó el hiyab, por lo que sus colegas la rodearon rápidamente para que no enseñara de más mientras se acomodaba la prenda.
Por razones religiosas, las mujeres en aquella región no pueden mostrar nada más que su rostro, pues según la norma musulmana, no deben exhibir su cabeza para no ‘despertar los deseos carnales de los hombres’, razón por la cual las futbolistas deben incluir este tipo de velo en su uniforme.
Son varios grupos islámicos quienes han impuesto como castigo latigazos en sitios públicos para las féminas que no sigan las reglas.
Por la empatía mostrada hacia su compañera, usuarios en redes sociales han aplaudido el acto de respeto hacia la deportista.
Con información de El Imparcial