Este miércoles, el pleno del Congreso de Perú destituyó a su presidente, Pedro Castillo, por “permanente incapacidad moral” con 101 votos a favor de 130 posibles, después de que este anunciara la disolución del Legislativo y declarara un Gobierno de excepción de emergencia, lo que fue calificado como un golpe de Estado por diferentes voces, incluida la vicepresidenta.
Así, opositores y ciudadanos peruanos se concentraron en la Embajada de México en Perú para impedir que el mandatario busque refugio y asilo en suelo nacional mexicano.
Los opositores comenzaron a concentrarse poco después de las 13:00 horas locales; al tiempo que seguidores de Pedro Castillo gritaban consignas a favor del mandatario peruano.
El Procurador General en Perú, Daniel Soria, presentó denuncia penal ante la Fiscal de la Nación, contra el expresidente Pedro Castillo, por la presunta comisión de los delitos de sedición, abuso de autoridad y grave perturbación de la tranquilidad pública. Así, fue detenido y fue ingresado por autoridades policiacas a la séptima región policial de Lima.
Al respecto, Marcel Ebrard, titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), aseguró que Castillo nunca se comunicó ni pidió ayuda a las autoridades mexicanas y anunció el aplazamiento de la Cumbre de la Alianza del Pacífico prevista para el próximo miércoles.