Desesperada, harta y cansada de tener a su bodoque de «nini» en casa, sin hacer nada de provecho, una madre decidió correr de la casa a su retoño para ver si así se ponía las pilas.
«En toda la cuarentena (por el coronavirus), se la pasó sentado en el sillón y me pedía que todo le sirviera ahí, donde jugaba, todo el día estaba jugando sus «videojuegos», dijo tristemente la mujer, quien menciona que cuando vio que la ciudad comenzó a reactivarse, le pidió de favor que fuera pensando en ponerse a trabajar, para que la apoyara con los múltiples gastos de la casa (como la comida por ejemplo), pero el joven hizo caso omiso a la petición de su señora madre y siguió echadote jugando y comiendo como si nada.
Como la mamá seguía insistiendo e incluso le dijo que si seguía así, mejor se fuera de la casa, a lo que el irresponsable hijo de 30 años, respondió yendo a la Fiscalía General de Justicia de Ciudad de México ¡para demandar a tanto a su mamá como a su tía, por agresión y hostigamiento! ¡¿Qué tal?!
Según Christian Uriel, usó la demanda porque que se «ofendió» luego de que su mamá lo corriera de la casa, «mi tía y mi mamá llegaron hasta el sillón, donde estaba y me aventaron agua helada, después me dieron unos escobazos para que me saliera de la casa», dijo a las autoridades para que le permitieran regresar… sin trabajar.
¡Háganme el refavrón cabor!