Si quieres probar tarántula en la capital mexicana debes ir al Mercado de San Juan de Pugibet y entre carnes exóticas –de jabalí, víbora, faisán y otras- y embutidos de excelente calidad, encontrarás algunos locales dedicados a preparar insectos y platos prehispánicos.
Entre ellos se encuentra México en el Paladar: local ofrece tarántulas provenientes de un criadero en Veracruz. Su preparación: la meten en el refrigerador durante tres minutos para que muera y después la hierven en agua y mezcal de Oaxaca. Posteriormente le dan un segundo hervor, pero ahora con verduras silvestres, y luego un tercero con sal de camarón.
Una vez hervida la tarántula se mete al horno y luego se le cepilla la panza con el objetivo de retirar todos los pelitos que la cubren –conocidos como vellos urticantes-, los cuales pueden provocar intoxicaciones o alergias.
Con eso, la tarántula está lista para comerse en taquito con aguacate o sola, patita por patita, panza y cabeza.
Con información de Animal Político