Esta temporada la superposición de capas continúa siendo tendencia principalmente en su versión de jerseys y camisetas de cuello alto bajo vestidos. Sobre las pasarelas los diseñadores apuestan por vestidos de largo midi. Este largo favorece a mujeres de estatura media-alta. Si eres petite puedes sumarte a la tendencia apostando por vestidos mini que te ayudarán a lucir más estilizada.
Una de las ventajas de esta tendencia es que te permite rescatar los vestidos veraniegos y reutilizarlos en otoño, e incluso en invierno. El truco es jugar con una superposición de capas para crear un outfit que te permita combatir las bajas temperaturas. Por ejemplo, una propuesta sería unas medias en cashmere, unas botas altas, un jersey de cuello alto, un cárdigan en lana y como punto focal ese vestido que tanto te gustaba este verano. Los tejidos veraniegos son más vaporosos, por lo que la mezcla de texturas añadirá tendencia a tu total look.
Los vestidos pueden responder a diferentes siluetas, cortes y estilos. Elegir el tipo de vestido que más te favorece es la clave de esta tendencia. Los jerseys se presentan en cuello alto o cisne, cubriendo totalmente el cuello; en cuello vuelto, una vez que cubre el cuello cae sobre el escote, o en cuello perkins que es aquel cuya altura se queda a mitad del cuello, y que tiene su origen en el vestuario del célebre actor Anthony Perkins en Psicosis (Hitchcoch, 1960).
Los accesorios suman tendencia a esta propuesta. Botas, bolsas, gorros o guantes pueden ser tus aliados para completar el outfit. Para balancear el look intenta que si el vestido es liso y sencillo, el jersey presente estampados o el tejido tenga cuerpo y estructura. En cambio, si el vestido es ornamentado apuesta por jerseys simples en punto, lana, cashmere o canalé.
Este combo se presenta como uno de los ganadores de la temporada, ¿te atreves?
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