El domingo pasado ocurrió algo que dejó helados a adultos y niños que esperaban para ver comer al animal siberiano Typhoon, un tigre de Amur que lleva 16 años en el zoológico de Kaliningrado (Rusia) sin dar más ruido que su propio rugido: el felino saltó sobre la cuidadora que iba a dejar el alimento en el recinto, la inmovilizó en el suelo y la mantuvo bajo sus fauces durante unos segundos interminables. La mujer ha sufrido heridas, pero no se teme por su vida. Tuvo suerte: la salvó el público, que aterrado, lanzó piedras, mesas y sillas hasta que el animal soltará a su presa y esta pudo refugiarse en un lugar seguro del que fue rescatada. «La cuidadora está en el hospital, está en estado de shock», ha señalado un portavoz del zoológico.
Los hechos ocurrieron cuando la cuidadora del tigre, fue al comedero del animal para dejarle su ración diaria. Tras sufrir una violación a la seguridad dejándola a merced de Typhoon.
El tigre pudo abandonar la jaula de seguridad, salir al exterior del recinto y lanzarse sobre la trabajadora, que quedó atrapada bajo las garras de Typhoon, aterrada, con la cara desencajada y lanzando gritos, como puede verse en las fotos que tomaron algunos curiosos.
Gracias a la reacción del público, que gritó y lanzó al animal piedras, palos y, sobre todo, mesas, sillas y bancos de una cafetería cercana, el animal aflojó y la cuidadora pudo escapar y refugiarse en la jaula, donde pudo ser rescatada. «Es la primera vez que este tigre ataca a alguien», asegura el zoo, que ha abierto una investigación oficial
«El animal actuó por instinto. No fue una agresión sino que estaba defendiendo su territorio», ha asegurado un portavoz del zoo. Además, los responsables de la instalación no van a tomar ninguna medida contra Typhoon, «que también ha sufrido mucho estrés», comentan.