El republicano Donald Trump y el demócrata Bernie Sanders ganaron este martes las elecciones primarias de New Hampshire.
El multimillonario republicano, ganó con 35,1 por ciento de votos, casi 20 puntos de ventaja con respecto al segundo.
Sanders, obtuvo 60 por ciento de los votos, con una distancia de 22 puntos sobre su rival Hillary Clinton.
Sanders compareció después de la candidata Hillary Clinton, y preguntó al subir al escenario: «¿Están listos para una idea radical? Juntos vamos a crear una economía que funcione para todos, no solo para el 1%, con un salario mínimo de 15 dólares por hora y con igualdad salarial para las mujeres».
Por su parte, Trump dijo que “El mundo nos va a respetar de nuevo. Créanme”. Luego hizo promesas: mayor creación de puestos de trabajo, fin de la epidemia de heroína, victorias comerciales sobre Japón, China y México, destrucción del Estado Islámico, entre otras.
La victoria de Trump y Sanders es el triunfo de dos políticos atípicos en sus partidos. Ambos, a pesar de sus diferencias, recogen el descontento de los estadounidenses con el statu quo.
El resultado en New Hampshire, un pequeño Estado de 1,3 millones de habitantes en el noreste de EE UU, refleja el carácter excepcional de esta campaña.
Con información de El País