Este martes el presidente de Estados Unidos firmó dos decretos para resucitar los proyectos de construcción de los oleoductos Keystone XL y Dakota Access, que la Administración de Obama había frenado por el daño medioambiental que causan. La medida refleja el giro que el nuevo Gobierno estadounidense ámbito del cuidado del medio ambiente y dijo que «el ecologismo está fuera de control”.
La construcción de los oleoductos estará condicionada a realizarse con productos y mano de obra estadounidense. “Vamos a renegociar algunas condiciones”, dijo el republicano, “y si les gusta, veremos si podemos construir ese oleoducto, [habrá] muchos empleos, 28.000 estupendos empleos de construcción”. “Vamos a devolver al trabajo a un montón de trabajadores del acero”. “Vamos a construir nuestros propios tubos, como en los viejos tiempos”, enfatizó el empresario neoyorquino.
Con información de El País