Autoridades del estado de Texas, en Estados Unidos, suspendieron temporalmente la ejecución del mexicano Roberto Moreno Ramos quien estaba condenado a la pena capital por matar en 1992 a su esposa y sus dos hijos para volverse a casar tres días después.
Los abogados defensores recurrieron a la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos y forzaron a la justicia de Texas a retrasar la ejecución.
El gobierno de México pidió a Washington y, en concreto, al Estado de Texas, que detuviera la de Moreno en cumplimiento de un fallo de la Corte Internacional de Justicia.
Hasta el momento no se ha anunciado la fecha de reprogramación de la ejecución.
Un jurado de una corte del condado de Hidalgo, en el sur de Texas, lo declaró culpable de haber dado muerte con golpes de martillo a su esposa Leticia Ramos, de 42 años, a su hija Abigail de siete y a su hijo Jonathan de tres, el 7 de febrero de 1992 en la comunidad fronteriza de Progreso.
De acuerdo con las autoridades, Moreno Ramos asesinó a su familia para casarse de nuevo, tres días después de haber cometido los homicidios.