Los peritajes de la PGR señalan que la familia de Nuevo Laredo que se trasladaba en una camioneta, sí recibieron impactos de las Fuerzas Armadas. Fueron asesinados los dos padres y dos menores en un supuesto enfrentamiento entre Marina y grupo de delincuentes hace 10 días.
En una conferencia de prensa, el titular de la Coordinación de Servicios Periciales de la Agencia de Investigación Criminal explicó que tras analizar los indicios balísticos, sus trayectorias, el tipo de armas y la ubicación de vehículos involucrados se concluyó que el vehículo donde se trasladaba la familia quedó bajo el fuego aéreo que desplegó un helicóptero de la Marina.
La Marina había descartado desde un comienzo que los disparos que recibieron los civiles fueran de armas utilizadas por la institución. Incluso, un asesor jurídico de la dependencia, Juan Velázquez, señaló que era “falso que el helicóptero de la Marina haya disparado a las personas”.
“Al día de hoy, sabemos que (los marinos) fueron apoyados en ese lugar por un helicóptero de la Secretaría de Marina haciendo un viraje sobre la zona y de esta manera al ser agredidos realizan los disparos; por eso estamos seguros que, al inicio de la agresión, el vehículo de la familia va pasando de una dirección de oriente a poniente hasta el lugar donde fue encontrado”, relató el experto en un mensaje a medios.
En uno de los ataques, presuntos criminales atacaron un convoy oficial; ahí cuatro elementos resultaron heridos y murieron tres atacantes. En este hecho, se involucró un helicóptero de la Marina el cual fue en apoyo de sus compañeros, sin embargo también disparó contra el auto donde se trasladaban dos menores de seis y cuatro años de edad, así como su madre, de 28 años, y su padre de 25 años.
Con información de Animal Político