Beijing amaneció este jueves por tercer día consecutivo con un nivel de contaminación que supera en casi 27 veces el máximo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El ministro del medio ambiente de China, Chen Jining, reconoció que la densa nube de partículas en suspensión supera los 500 mil kilómetros cuadrados.
La situación ha llevado a las autoridades asiáticas a decretar la alerta naranja por un espeso smog que ha dejado a Beijing sin sol por al menos tres días
Las autoridades asiáticas obligaron a dos mil 100 fábricas a detener su producción, además de la detención por parte de inspectores de seguridad a vehículos de transporte que se saltaban la prohibición en diversos puntos de la ciudad.
Las escuelas recibieron la orden de mantener a los alumnos en el interior de los establecimientos, sin realizar actividades en el exterior.
Tan solo en China 4 mil personas mueren a diario por la contaminación.
Con información de Reforma