Más de 400 pasajeros pasaron la noche en el Aeropuerto Internacional O’Hare de Chicago, esto ocurrió la noche del domingo, tras perder su vuelo, los pasajeros decidieron quedarse a dormir ahí.
Esto debido a las largas filas de seguridad, que los han hecho pasar por el filtro que toma más de tres horas.
Este Aeropuerto es considerado como el tercero más concurrido del país.
La Administración de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos (TSA) ha señalado que tiene el compromiso de añadir 800 nuevos inspectores para el mes de junio. Sin embargo, el sindicato que representa a los trabajadores señala que se necesitan seis mil nuevos inspectores para reforzar la seguridad.
Las filas no mejoraron este lunes por la mañana, ya que las líneas atiborraban los pasillos cuando se les dijo a los pasajeros que debían esperar hasta tres horas para los vuelos internacionales.
La semana pasada el TSA advirtió a los viajeros que podían sufrir varios retrasos en todo el país luego de la reducción de sus plantillas y el aumento en el número de viajeros.
Con información de López Dóriga