Decir Nuevo Café Bagdad es relativo, ya que existe desde hace 50 años, primero estuvo en el club deportivo Nader, donde la crema y nata de la colonia libanesa y española de esa época, se daba cita para hacer ejercicio y tomar café.
Al cerrar el centro deportivo, el Café Bagdad se cambió a los bajos de una casona frente a la plaza La Aguilita, cerca de la Merced. En esa época era el centro antiguo de la ciudad de México y vivían familias ricas y de abolengo. Se cuenta que, en esa plaza, el águila devoro a la serpiente y no en el lugar donde los historiadores la ubican.
El centro de la ciudad de México tiene mucha historia y un sin fin de anécdotas, conversando con los parroquianos que toda su vida han vivido en esos rumbos, me platican que donde se encuentra la estación de metro Pino Suárez, estaba el rastro de la ciudad y el dueño era el Marqués de Aguayo, a él solo le gustaba comer una sola parte de la res, y por eso le pusieron el nombre de Aguayón.
El actual propietario del Nuevo Café Bagdad, es el joven empresario Luis Xavier Roca, enamorado de esa parte del centro de la ciudad de México. Ha puesto mucha fe en ese sitio de la ciudad y piensa abrir o rescatar más negocios, poner hasta un hostal para turistas. Si el Nuevo Café Bagdad, ofrece su ya legendario café, que es un secreto guardado desde hace años, una mezcla de café de Veracruz y de Puebla, tostado en su antigua y legendaria tostadora. Ofreciendo desayunos y comidas de lunes a sábado de las 8:00 a las 7:00 pm.
Una parte del centro histórico con mucha historia y casonas que tienen su capilla privada, recordando así el lujo y esplendor que tuvieron en su época.
Para ser irreemplazable, uno debe buscar siempre ser diferente. Coco Chanel.