Para que México compita, innove y patente, es imprescindible aumentar la inversión en ciencia, tecnología e innovación, afirmó el rector de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas, al inaugurar el LXV Año Académico de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC).
En ese sentido, destacó que los recursos que el país destina a investigación y desarrollo contrastan con los de naciones líderes en ciencia y tecnología, pues de acuerdo con el Quinto Informe de Gobierno, en 2021 México invirtió el 0.28 por ciento del producto interno bruto (PIB) en ese rubro, mientras que Estados Unidos destinó el 3.46 por ciento, Alemania el 3.13 por ciento, y Japón el 3.3 por ciento.
“A pesar de que se han hecho esfuerzos significativos, aún queda un largo camino por recorrer. Por ello, el fortalecimiento del financiamiento y la cooperación internacional son estratégicos para alcanzar y mantener estándares globales en estas esferas”, agregó el rector acompañado por el presidente de la AMC, José Seade Kuri; y el rector de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), José Antonio de los Reyes Heredia.
En el auditorio “Alfonso Caso” de la Universidad Nacional, el rector también refirió otro aspecto central en el ecosistema: el número de integrantes de tiempo completo por millón de habitantes. En 2021 nuestra nación contaba con poco más de 384; en Estados Unidos había casi cuatro mil 450; en Japón alrededor de cinco mil 640; y en Canadá y España poco más de cinco mil y tres mil 200, respectivamente.
“Además de mostrar diferencias estructurales, esta disparidad refleja la prioridad que se le da a esta área importante para la inserción de un país en la economía global”, añadió Lomelí Vanegas ante la integrante del Patronato de la AMC y miembro de El Colegio Nacional, Julia Carabias Lillo; y del expresidente y decano de la AMC, Ismael Herrera Revilla.
Luego de felicitar y entregar reconocimientos a los nuevos miembros de la Academia, el rector de la UNAM recalcó que se debe cultivar y retener al talento mexicano en nuestras instituciones de educación superior, en los diversos centros especializados, a fin de asegurar una mayor capacidad científica y técnica.
De igual forma, es necesario cerrar la brecha de género, especialmente en la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (áreas STEM, por sus siglas en inglés), pues según la UNESCO menos del 30 por ciento de quienes se dedican a la investigación en América Latina y el Caribe y solo un tercio del mercado laboral en estas áreas, son mujeres. En México solamente 38 por ciento de quienes estudian estas carreras a nivel de educación superior, son mujeres.
El rector también sostuvo que ante los múltiples y complejos retos que el siglo XXI nos presenta como la emergencia climática, la exacerbación de desigualdades, la vertiginosa revolución digital, la violencia de género y los retrocesos democráticos, es imperativo que la ciencia se enfoque en soluciones inter y transdisciplinarias que promuevan un porvenir con mejores oportunidades.
También expresó la total disposición de trabajar para fortalecer la relación entre esta casa de estudios, la AMC y sectores no académicos, con la finalidad de crear sinergias que potencien la educación y la innovación. “La Universidad Nacional seguirá siendo un espacio abierto al diálogo y la acción colectiva donde las ciencias se integren de manera transversal, enfocándonos en incluir una perspectiva de género y sostenibilidad en todas las áreas”.
En la ceremonia, por parte de la UNAM recibieron reconocimientos los académicos: Ricardo Barragán Manzo, Arturo Carlos II Becerra Bracho, Luisa Isaura Falcón Álvarez y Rosa Ventura Martínez.
Política de ciencia y presupuestos multianuales
En su oportunidad, el presidente de la AMC, José Seade apuntó que nuestro país carece de política de ciencia, tecnología e innovación robusta y con peso suficiente en la agenda nacional, por lo que se debe impulsar su diseño como resultado de un diálogo entre todos los actores de este sistema.
De igual forma, aseguró que para lograr que la investigación científica y tecnológica aporte soluciones para resolver los problemas nacionales es necesario desarrollar una estrategia de expansión de la planta científica nacional, ampliar mecanismos de formación de recursos humanos, crear nuevos centros de investigación en áreas estratégicas; establecer una adecuada vinculación con los sectores productivos y sociales; además de contar con mecanismos de financiamiento estables, progresivos, multianuales y suficientes.
Seade Kuri también celebró que durante la próxima administración federal se pueda contar con una Secretaría de Ciencia, la cual ha sido una demanda persistente de los actores de este sistema.
Acompañado por la coordinadora de la Comisión de Derechos Humanos de la AMC, Gabriela Dutrénit Bielous, así como de la integrante del Patronato de la Academia e investigadora emérita del CINVESTAV, Esther Orozco Orozco, el rector de la UAM, José Antonio de los Reyes Heredia celebró el ingreso de los nuevos miembros de la Academia, pues dijo que es una muestra de la incorporación del nuevo talento científico de México y de la difusión de la ciencia en sus distintas expresiones.
Resaltó que la autonomía de las universidades y de distintas instituciones es la raíz de la libertad de cátedra e investigación, fuentes de creatividad, originalidad y del pensamiento disruptivo indispensable para atender necesidades nuevas y urgentes como el cambio climático, la desigualdad, el surgimiento de nuevas enfermedades que demandan de la interdisciplina.
En la ceremonia estuvieron también: el presidente en turno de la Junta de Gobierno de la UNAM, Enrique Cabrero Mendoza; la secretaria General, Patricia Dolores Dávila Aranda; la coordinadora de la Investigación Científica, María Soledad Funes Argüello; el embajador de México en China, Jesús Seade Kuri; la secretaria de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación de la Ciudad de México, Jesús Ofelia Angulo Guerrero; así como directores e investigadores eméritos de diversos centros e institutos de investigación de la UNAM, y de otras instituciones de educación y ciencia del país y del extranjero.