Siguen los jaloneos en Estados Unidos, previo a las elecciones presidenciales de noviembre próximo.
Ahora, el presidente Barack Obama afirmó que el candidato republicano Donald Trump demuestra una y otra vez que “no está capacitado” para la Presidencia. Por ello, llamó a los líderes del Partido Republicano a retirarle su apoyo.
“Creo que el nominado republicano no está capacitado para servir como presidente. El hecho de que no parezca tener las nociones básicas sobre temas clave en Europa, en Oriente Próximo o en Asia significa que está muy poco preparado para hacer este trabajo. Lo demuestra una y otra vez”, dijo el mandatario.
No fue muy apresurado para decirlo, ya que el legislador por Nueva York, Richard Hanna, dijo públicamente que votará por la demócrata Hillary Clinton. “No está capacitado para servir a nuestro partido y no puede liderar este país”, dijo en referencia al magnate.
Lo mismo han hecho el ex alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg; y el dueño de los Dallas Mavericks de la NBA, Mark Cuban, entre otros.
La controversia se avivó luego de los ataques del magnate contra Khizr y Ghazala Kahn, los padres de un soldado musulmán condecorado que murió en la guerra de Irak y que es considerado héroe en la Unión Americana.
“Lo que se tienen que preguntar (los republicanos) es: si tienes que salir repetidamente a decir en duros términos que lo que ha dicho es inaceptable, ¿por qué lo siguen apoyando?, ¿qué dice esto de su partido y de su abanderado?”, cuestionó Obama.
Evidentemente, Trump no se ha quedado callado.
“Creo que (Obama) ha sido un desastre. Ha sido débil, ha sido ineficaz. Estoy convencido de que yo sé mucho más de política exterior que él. Fíjate en Ucrania. Él habla de Ucrania y de lo duro que es con Rusia, mientras tanto ellos se tomaron Crimea”, apuntó.
Además aseguró que Barack Obama es “el peor presidente, quizás el peor presidente de la historia del país”.
A todo esto se sumó la crítica sobre su actuación durante un mitin en Ashburn, Virginia, donde expulsó a un bebé y a su madre.
Y es que el recién nacido no paraba de llorar. Al inicio, el aspirante a la Casa Blanca aseguró “amo a los bebés, escucho a un bebé llorar y me gusta”. Sin embargo, poco le duró el amor, ya que unos dos minutos después dijo “en realidad solo estaba bromeando, puedes llevarte a este bebé de aquí”.
Con información de El País y El Mundo