En Michoacán, Yunuen Pérez Castellanos, de cuatro años de edad jugaba junto con su primo de 9 años en una recámara de su casa cuando el primo encontró una pistola de un cajón y al parecer por accidente, la detonó contra ella.
Las madres de ambos trabajaban en la casa y acudieron a la habitación al escuchar la detonación para encontrar a Yunuen herida. De inmediato la llevaron a una clínica del IMSS donde murió.
Isidra Pérez García, madre del niño declaró que ella creía que la pistola que su marido guardaba en el cajón no servía.
El procurador de Justicia de Michoacán, Martín Godoy, declaró “no tenemos hasta ahora ningún elemento que arroje que hubo una intencionalidad en este lamentable homicidio que, sin duda, nos impactó”.
Con información de Aristegui Noticias