En las principales ciudades de Japón se llevarán a cabo una serie de ejercicios civiles para simular un ataque nuclear contra la población entre enero y marzo del 2018.
Ante avances de Corea del Norte en sus programas de misiles y armamento nuclear, Japón cree que este tipo de simulacros son una medida prudente.
Se estima que una bomba atómica de 250 kilotones detonada sobre Tokio causaría al menos 698 mil muertos y 2 millones 470 mil heridos, cifra que podría aumentar si se utilizaran múltiples cabezas nucleares.
Con información de SDP Noticias