Los niños Johana Paola (8 años) y Abraham (3 años) fueron encontrados muertos al interior de un refrigerador en desuso, al interior de una vivienda en la colonia Centro, en Culiacán, Sinaloa.
Las autoridades informaron que la madre de las víctimas se fue por la tarde a trabajar, y al regresar por la noche encontró a sus hijos. Primero pensó que estaban desmayados, pero luego descubrió que en realidad habían fallecido.
Los peritos del Servicio Médico Forense revelaron que los menores murieron por asfixia al quedar atrapados en el refrigerador. Además encontraron golpes en diferentes partes de los niños.
La madre informó que hace un mes se separó del padre de los niños.
Por ahora, las autoridades ya abrieron la investigación correspondiente.
Con información de Olegario Quintero, El Debate, y El Sol de Nayarit