Un grupo de ladrones, dos hombres y una mujer, robaron una tienda de Apple localizada en Upper West Side, Manhattan con éxito dos veces.
Mientras uno se encarga de hacerse pasar por trabajadora otro distrae al equipo que trabaja en el lugar y a los guardias del mismo y el tercero es el vigilante.
El botín en el primer asalto fue de 5 mil 300 dólares.
La segunda vez que volvieron a entrar a esa tienda, un hombre se hizo pasar por personal de la marca y fue entregándole teléfonos a la mujer quien se había escondido en el baño de la tienda, mientras el tercero distraía al personal del local.
Cuando el personal se dio cuenta, el trío había logrado escapar con 59 celulares, con una pérdida de 44 mil dólares para la compañía (Más de 813 mil pesos).
Estos robos comparten el mismo sistema usado el primero de junio para robar la tienda de Apple en SoHo, Nueva York.
Ambas tiendas son “de entrenamiento”, pues el personal de la misma esta acostumbrado a cambiar de compañeros de trabajo continuamente de modo que no se les hizo extraño ver gente nueva en la tienda esos días.
Con información de López Dóriga
